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6.4.10

CAPITALISMO Y COMUNISMO

CAPITALISMO Y COMUNISMO

Ricardo Fuego

Introducción


¿Por qué es difícil hablar de estos temas?
Porque hay una tendencia a formar nuestro pensamiento sobre la sociedad en base a anécdotas, vivencias personales, y evaluaciones muy subjetivas (a veces basadas en nuestras preferencias ideológicas, valores morales, etc.) de lo que experimentamos.

Yo a través de estos años de entrada a la militancia social y al pensamiento político radical, he cambiado no sólo mis ideas sino mi manera de pensar (de juzgar y de producir nuevas ideas). Para mí las anécdotas y evaluaciones subjetivas de mi vida personal, en cuanto a la formación de mi pensamiento social, pasan a un segundo plano. Lo que pasa a primer plano en mi pensamiento son los datos a nivel “macro” (la economía, la estructura social, los procesos más que los resultados, los roles más que las personalidades), y esos datos yo los analizo con las herramientas teóricas que he adquirido en estos años de estudio autodidacta y práctica autónoma de la ciencia social.

Todo este preámbulo no tiene como objetivo explicar por qué vos tendrías que pensar como yo, sino para explicar por qué yo pienso como pienso. Olvidémonos por un momento del absolutismo (si uno tiene razón todos los demás están equivocados) y del relativismo (todos tienen razón y nadie está equivocado). Vamos a establecer un diálogo. En base a mis experiencias charlando de estas cuestiones, yo voy a poner afirmaciones, preguntas y cuestionamientos a los que responderé como lo hice en su momento (o como deseo haberlo hecho).

El propósito no es reemplazar unas ideas por otras, sino desterrar certezas falsas y sembrar cuestionamientos, búsquedas. Allá vamos.


Diálogo entre una persona comunista y una persona de "pensamiento común”

-Hay capitalistas que se aprovechan de sus empleados y los explotan, pero hay otros que se hicieron su capital mediante su propio esfuerzo y por lo tanto es justo que ganen más que el obrero.


La realidad es que, incluso en el caso de que el capital inicial no provenga del trabajo de otros (herencia, rentas, empresa de la familia, etc.), a través del tiempo el capital invertido es ampliamente recuperado por el capitalista gracias al trabajo de sus empleados.

Pongamos el caso de que yo inicio una empresa con un capital propio. Luego de haber vendido todo lo que produje, obtengo una cantidad de plata. Parte de ese dinero va a los sueldos de mis empleados, otra parte a la reinversión en la empresa (compra de repuestos, materia prima, insumos, nuevas máquinas), y otra parte me queda limpia para mí.
Si el negocio va bien (y eso depende de si hay demanda de lo que la empresa produce pero también depende de mi trabajo y del de mis empleados), eventualmente voy a recuperar en forma de ganancia el capital que invertí al principio.
Veámoslo en un cuadro con números. El capital inicial es de 1000. Asumamos que la ganancia de la empresa es suficiente para la reinversión y para mi subsistencia y asumamos que yo me limito a cobrar rentas, que no trabajo en la empresa.
En el primer ciclo yo puse 1000 y la empresa hizo 500. De esos 500, 200 los pagué en salarios y me quedaron 300. De esos 300, decidí poner la mitad (150) en la empresa y el resto me lo quedo yo.

En el segundo ciclo se obtuvo una ganancia de 550. Sigo pagando 200 en salarios, por lo tanto la ganancia que tuve en ese ciclo fue de 350. De esos 350 aparto 180 para reinvertir y el resto me lo quedo.

En el tercer ciclo la ganancia es de 400. Los 1000 originales que puse no sólo fueron recuperados sino que yo me quedo con 50 adicionales (300 + 350 + 400 = 1050).

-Pero parte de lo que ganaste decidiste reinvertirlo en la empresa. El capital de la empresa creció de 1000 a 1720, y lo que generan los empleados nunca es suficiente para cubrirlo. Los empleados siempre están en deuda.

Incorrecto. Te olvidás que el capital adicional que pongo a partir del segundo ciclo vienen del trabajo de los empleados. El capital total de la empresa va creciendo, pero lo que yo puse de mi bolsillo sólo fueron 1000, y esos 1000 los recuperé en el tercer ciclo. ¡Si yo no recuperara mi inversión no sería negocio ser capitalista!

Fijate que incluso en el cuarto ciclo les aumenté el salario a mis empleados de 200 a 300. Pero ni siquiera así saldo la deuda que tengo con ellos. De hecho, mi deuda aumenta cada vez que se va acumulando ganancia. Al final del quinto ciclo tengo una ganancia acumulada de 1950, ¡casi el doble de lo que puse inicialmente!
Pero compliquémosla un poco más… Digamos que en los primeros ciclos la empresa no gana lo suficiente para garantizar la reinversión. Eso quiere decir que tengo que poner más capital mío. Pero si la empresa va bien y eventualmente la ganancia es suficiente para la reinversión, es sólo cuestión de tiempo para que el trabajo de todos pague ese capital invertido de mi bolsillo:

En el primer ciclo me faltaron 50 y los tuve que poner de mi bolsillo. En el segundo, como aumentó el valor obtenido, me faltaron 20. En el tercer ciclo ya no tuve que poner más plata porque la ganancia de la empresa fue suficiente para mi subsistencia y para la reinversión. De manera que a los 1000 iniciales se le suman 70. Lo único que cambió es que en vez de recuperar mi plata en el tercer ciclo lo recupero en el cuarto.


Podemos complicarla más todavía diciendo que yo trabajo a la par de mis empleados, o incluso más que ellos. O sea, que yo participo directamente de la producción de valor. ¿Qué pasa en ese caso? Lo mismo que en el caso anterior. Una simple diferencia de tiempo. Eventualmente mis empleados terminan superando, con su trabajo, el capital que puse inicialmente y el valor que produce mi propio trabajo.

Se pueden hacer muchas objeciones a estos cuadros y probar a ver qué pasa con otros números y otras variables, pero la realidad es que las empresas capitalistas no funcionarían si los capitalistas tuvieran que sacar continuamente capital extra de su bolsillo para asegurar la reinversión. Eso sólo pasa cuando las empresas están en crisis y ahí o la empresa se recupera o quiebra. Las empresas capitalistas funcionan porque garantizan una ganancia suficiente para cubrir los gastos de su existencia y porque le aseguran un mayor nivel de vida al capitalista que a los empleados.

Esto no quiere decir que el capitalista nunca se sacrifique. El capitalista, sobre todo si es pequeño o mediano, generalmente debe sacrificarse trabajando horas extras para la empresa, absteniéndose de consumir para ahorrar capital dinerario, adeudándose con un banco si le hace falta efectivo, etc. Pero por más que se valore éticamente ese sacrificio como superior al sacrificio de los empleados, la cuestión fríamente matemática es que el trabajo de muchos siempre va a producir más que el trabajo de uno. Sino, ese uno se bastaría a sí mismo, no necesitaría empleados.

-Todo lo que vos quieras, pero el que arriesgó al principio fue el capitalista. Es injusto que el capitalista, que es el único que arriesga, termine compartiendo su empresa con los empleados que no arriesgaron nada.

Antes que nada, el plantear la defensa de la ganancia capitalista en estos términos (morales) es reconocer que ya no se puede plantearla en términos racionales. Voy a volver un poco atrás.

Limitándome a analizar los hechos sin realizar ninguna valoración moral al respecto, he demostrado racionalmente que eventualmente, el trabajo de mis empleados va a pagar el capital mío que “arriesgué” cuando puse la empresa. El capital que sigo “arriesgando” después de recuperar la inversión de mi bolsillo es el capital generado por el trabajo de todos, y no sólo el mío. Cuando los empleados ya me pagaron con su trabajo todo el capital que invertí al principio, la ganancia que obtengo a partir de ese momento viene pura y exclusivamente del trabajo de ellos.

Esta demostración no es nada del otro mundo, es pura lógica y aritmética. ¿Entonces por qué resulta tan chocante? Porque lo que nos han inculcado y lo que hemos aprehendido como “sentido común” nos condiciona psicológicamente, pre-racionalmente. Por lo tanto, un razonamiento, aunque sea válido, sigue siendo rechazado cuando choca contra este condicionamiento psicológico. A todos nos pasó alguna vez que hemos escuchado o leído una argumentación que, aunque no pudimos refutarla con hechos ni encontrarle una falla en su lógica, nos resultó inaceptable, y por lo tanto nos seguimos quedando con nuestras ideas.


Esto es normal. Tenemos una tendencia a identificarnos con nuestras ideas. Si las ideas con las que más nos identificamos son criticadas, en cierto modo nos sentimos amenazados. Por eso la única manera en que puede prosperar un diálogo sobre ideas tan relacionadas a nuestra identidad social como capitalismo y comunismo (casi todo el mundo tiene una posición tomada sobre el tema, con más o menos fundamento), es desidentificarnos de nuestras ideas por un momento. Hacer de cuenta que somos extraterrestres mirando este planeta o científicos mirando un hormiguero. Lo que nos tiene que interesar es llegar a la verdad, no tener la razón. Si no podemos hacer eso, más vale renunciar al diálogo, porque sino se convertirá en un monólogo de muchos.

Habiendo hecho esta advertencia, paso a responder la pregunta.

Aun viendo el tema desde la perspectiva de lo ético, ¿bajo qué ética es posible justificar que yo gane más que mis empleados luego de que ellos, con su trabajo, me pagaron todo lo que invertí al principio? Únicamente bajo mi ética particular. O sea, bajo la ética de alguien que valora lo que le beneficia como bueno y lo que le perjudica como malo.

Pero una ética particular, por más que sea compartida por la mayoría de la gente y resulte “lógica”, “razonable”, etc., no se transforma en ética universal. Una ética universal nunca puede partir de las necesidades y capacidades asociadas a un rol social en particular (sea el capitalista o el obrero). Sólo puede partir de las necesidades y capacidades comunes a todos los seres humanos. Esas necesidades y capacidades son comer, dormir, vestirse, amar, realizarse, producir, etc. Entonces, juzgar al capitalismo con la ética capitalista, siempre va a resultar favorable al capitalismo. Al capitalismo hay que juzgarlo con una ética universal, humanista. Es la única manera de obtener un juicio objetivo.

Pasando a la cuestión del riesgo: no es cierto que los empleados no corren ningún riesgo. Si el capitalista se funde, los empleados se quedan sin trabajo. Si los empleados no trabajan lo suficiente para que la empresa se haga un lugar en el mercado (cuando hay otras empresas competidoras), se quedan sin trabajo. El capitalista decide a quién contrata y a quién despide, y cuándo. El capitalista arriesga un capital propio que heredó o que amasó con trabajo extra, pero ese riesgo lo corre una sola vez. El obrero arriesga constantemente el sustento de sí mismo (y de su familia, si la tiene) porque todos los días que va a trabajar tiene que rendirle a la empresa.

-El que se esfuerza por dar trabajo sigue siendo el capitalista. Si el empleado no trabaja en una empresa, trabaja en otra.

Hay que entender algo: nadie “da” trabajo a otra persona. Es un juego de oferta y demanda. El trabajo en esta sociedad es un contrato comercial. El capitalista compra fuerza de trabajo, el empleado vende su fuerza de trabajo. Y dependiendo de quien esté en mejor posición para negociar, va a ser el precio de la fuerza de trabajo. Cuanto más desempleo haya en los trabajadores mi gremio, menor salario van a ofrecer los capitalistas.

El desempleo existe, y sólo de manera muy obtusa puede explicarse el desempleo por cuestiones como vagancia. Para ciertos gremios de trabajadores especializados, escasean las fuentes de trabajo porque hay poca demanda en relación con la oferta. Para los trabajadores no especializados, la situación siempre es mala, porque son los que más sobran y por lo tanto sus condiciones de trabajo son las más precarias.

-Eso no quita que a veces los empleados se abusan del capital.

La gran mayoría de la gente en este mundo lo único que tiene para vender es su fuerza de trabajo. Entonces obviamente que el empleado está obligado a actuar como un comerciante (igual que el capitalista, que no pagaría salarios si no le conviniera) y lógicamente va a buscar el mejor precio posible. Si una vez de cada diez (y es decir mucho) es el empleado quien logra torcerle el brazo a un empleador, ¿hay que dejar de ver todo lo demás?

Los derechos laborales, la seguridad social, la jubilación, las pensiones, la jornada laboral máxima, el salario mínimo, los subsidios al desempleo, etc. no fueron dádivas de gente amable hacia los empleados ni mucho menos se debieron a una pretendida dictadura de los empleados sobre los capitalistas (¡¿dónde se vio una dictadura de los explotados sobre sus explotadores?!). Fueron reivindicaciones que la clase obrera organizada debió arrancarle al capital privado y al Estado (el capitalista público) mediante lucha y sangre derramada. Hay que conocer la historia de las cosas que existen hoy y no asumir que “siempre existieron”.

-¿Por qué los capitalistas son explotadores? Eso no es cierto. Algunos capitalistas son explotadores, otros no.

Actualmente el término explotación resulta tan políticamente incorrecto que queda olvidado su verdadera significación científica social: extracción de plus trabajo. El explotado no es quien recibe “menos de lo que merece” o, en una definición más objetiva, quien recibe menos de lo que necesita para (sobre)vivir. No importa si el patrón es bueno o malo, si trata bien o mal a los empleados, si el trabajo de los empleados es extenuante o divertido, jornada larga o jornada corta. Si el trabajador produce más valor del que percibe, es porque hay una apropiación de esa diferencia por quien le emplea, y eso es explotación. Una persona es explotada tanto si produce un valor de 10 y le pagan 1 como si produce 10 y le pagan 9. No se trata de si es justo o ético (¿según quién?) que el trabajador reciba 1 o 9. Es un simple hecho matemático: si el trabajador recibe menos de lo que produce, es explotado.

-Pero entonces, ¿se puede trabajar sin ser explotado?

Sí, como cuando trabajás limpiando tu casa o haciendo una comida para tu familia y/o amistades, o escribiendo tu diario. Todo eso es trabajo en el sentido de gasto de esfuerzo físico y mental. Pero cuando hablamos del trabajo directamente inserto en la economía capitalista (trabajo asalariado), no es posible independizarlo de la explotación.

Las cooperativas son un ejemplo de las limitaciones que tiene cambiar las cosas dentro de una empresa pero no cambiarlas en toda la economía. En las cooperativas la propiedad de la empresa es colectiva, no hay división patrón/empleados. Pero si bien los trabajadores de la cooperativa no son explotados por un capitalista, están obligados a auto-explotarse ellos mismos. ¿Por qué? Porque no pueden consumir todo el valor que producen, están obligados a asumir colectivamente el rol del capitalista y tomar parte del valor obtenido y reinvertirlo en la empresa. Una cooperativa, exteriormente, y sobre todo cuando tiene competencia, está obligada a comportarse como cualquier otra empresa capitalista.

La única forma de alcanzar una economía sin explotación es reorganizando la base económica de la sociedad en la asociación de los productores libres e iguales. Esto no es pura teoría, sino que ya se ha hecho realidad en revoluciones sociales como la de la Comuna de París, en algunas colectividades agrarias de España, etc.

En este tipo de asociación los productores de un pueblo, una ciudad, o una comuna rural se juntan y dicen:

“Bueno, vamos a organizar entre todos la economía de nuestra comunidad. Tenemos estos campos, fábricas, talleres, y oficinas. En vez de que cada una de estas unidades productivas sea una empresa privada que compita con las demás, vamos a articularlas mediante una planificación general para producir los bienes que todos necesitamos. En vez de producir para vender en competencia con otros, cada unidad productiva producirá la cantidad de bienes necesaria para los habitantes de la comunidad (y un poco más, por las dudas). Entonces, si antes teníamos 3 panaderías que producían 300 kilos de pan cuando la comunidad necesita solo 100, al abolir la competencia y dividirse el trabajo entre ellas para producir 150 kilos como máximo, nos ahorramos tener que gastar tantas horas de trabajo y recursos en producir pan irracionalmente, y esas horas de trabajo pueden destinarse a otros trabajos necesarios para la comunidad o a la cultivación, a estar con la familia, a investigar cómo ahorrar más trabajo en otras áreas, y a participar en la administración de todos los asuntos de la comunidad, etc.”

-Todo muy bonito, pero ¿de qué va a vivir la gente?

Si yo trabajaba de plomero, no voy a necesitar ejercer mi oficio por dinero para después comprar todo lo que necesito. Todos los bienes de consumo que yo necesito van a estar o en mi casa o en los almacenes comunitarios. De esta manera, puedo liberar mi oficio de la actividad de ganar dinero. Yo voy a arreglar gratis los caños de la casa del panadero porque sé que el panadero va a mandar el pan que produzca al almacén comunitario, donde yo voy a tomar el pan que necesite.

Además, racionalizando el trabajo de plomería necesario para la comunidad, se puede ahorrar el tiempo dedicado a esa tarea y no voy a tener por qué quedarme solamente en ese oficio: podré aprender otros. Hay trabajos que los puede hacer todo el mundo y por el cual se puede establecer un sistema de turnos, como barrer la calle. Hay otros donde son necesarios especialistas y se puede socializar ese conocimiento con planes de capacitación. A medida que la gente no necesite trabajar 8 horas por día todos los días de la misma cosa, puede aprender otros oficios y tareas, y las especialidades que no son tan complejas (no todos van a ser neurocirujanos) irán desapareciendo. Antes la escritura era una especialidad, por eso existían los escribas. Hoy esa especialidad no existe, porque gracias a la instrucción pública escribir está al alcance de la mayoría. Con la expansión de la instrucción pública se pueden incluir gran parte de las tareas industriales y artesanales que actualmente son delegadas a especialistas.

Si la comunidad se coordina para que cada cual ponga según su capacidad y cada cual tome según lo que necesita, los recursos serán utilizados racionalmente y las situaciones de escasez serán paulatinamente resueltas. Lo que no puede fabricarse en la comunidad, se consigue de otra donde sí se fabrique (mediante trueque, por ejemplo). Mientras tanto, se va construyendo la fábrica local (si es necesario).

Puede haber miles de objeciones a un sistema económico de esta naturaleza, y cada una de esas objeciones tendría su respuesta. Hay muchísima bibliografía que trata el tema de reorganizar la economía según la propuesta de la asociación de los productores libres e iguales. La más didáctica y completa que conozco es La conquista del pan, del anarquista ruso Kropotkin. Pero no sólo hay propuestas, sino que ha habido experiencias. A menos que se tenga la postura de “tenés 5 minutos para convencerme de la necesidad y posibilidad del comunismo”, es obvio que tiene que haber una disposición a investigar el tema por uno mismo. Así fue como aprendí yo, por interés propio y no porque conversara con alguien que tenía todas las respuestas que terminó por “convencerme”.
-Se ve que las pensaste todas, pero vamos a lo práctico: lo que querés es imposible. La gente es egoísta.

Lo que “se ve” es que esta respuesta tuya es un manotazo de ahogado. Pero la voy a responder porque te va a servir para aprender algunas cosas sobre “la gente”.
Como primer punto, la gente que habla de “la gente”, generalmente está hablando de sí misma o de lo que elige ver en sí mismo y en otros. Hay muchísimos ejemplos de altruismo y cooperación en la vida, incluso en la gente que, generalmente, es egoísta. Si siempre estuviéramos compitiendo con el otro y actuando solo para nuestro beneficio, no habría sociedad. Si pensás detenidamente en un día cotidiano tuyo, vas a ver que gran parte del mismo te la pasás cooperando con otras personas en base a necesidades comunes. Y a veces te vas a dar cuenta que estás haciendo algo donde ponés las necesidades del otro por encima de tus deseos o incluso de tus propias necesidades. Incluso si lo hacés porque es necesario para tu supervivencia, o porque el beneficiario de esa actividad altruista es hijo tuyo, o simplemente por la gratificación personal que sentís al hacerlo, la realidad es que estás haciendo algo que no es egoísta.

Vos podés haber llegado a “la gente es egoísta” analizando varios casos de egoísmo que experimentaste de primera mano. Pero es una generalización incorrecta, porque como dije antes (y como vos sabés, si elegís verlo) “la gente” también es no-egoísta.

Entonces, “la gente es egoísta” se revela como lo que es: una frase que no resiste al más mínimo análisis, y que sólo sirve como axioma para justificar comportamientos antisociales (ajenos o propios) y, por lo tanto, para dar una fundamentación (falsa) a la idea de que “nada va a cambiar”. Es una manera de seguir quedándonos en la zona cómoda de “yo tengo razón” y de evadir las responsabilidades de todo individuo hacia su especie.

Si la competencia es “natural”, la cooperación lo es aun más todavía. Vos y yo lo hemos visto en nuestras vidas cotidianas, pero también se ve en ONGs y espacios de militancia social donde gente que no pasa necesidades invierte parte de su tiempo (y a veces, dinero) en ayudar a otros.

Lo que me diferencia de vos no son capacidades intelectuales diferentes, sino que yo he tomado conciencia de que reorganizar la sociedad en base a la cooperación y al no-egoísmo[1], no sólo es posible, sino necesario para detener esta catástrofe.

-Igual es una utopía.

“Utopía” es una de esas palabras que se utiliza todo el tiempo sin conocer su significado. La utopía es una imagen idealizada del porvenir. Los utopistas sociales primero arman una sociedad perfecta en sus cabezas y después buscan la manera de ir desde donde estamos hacia esa imagen. A menudo los utopistas creen que lo que es necesario en el ahora es dedicarse a convencer a los demás de lo deseable y justo de tal objetivo, y que con ese número y a fuerza de voluntad vamos a hacer ese sueño realidad.

Marx, que puede decirse con justicia que es el fundador del comunismo teórico moderno (el comunismo práctico moderno es una creación de los proletarios desde la misma revolución francesa[2]), criticó ese enfoque de los utopistas. Él encaró la transición del capitalismo al comunismo como un problema práctico[3]a nivel histórico-mundial, y por eso estudió el funcionamiento de la economía capitalista y estudió la historia a través del prisma de los sistemas económicos y de la lucha entre las distintas clases generadas por esos sistemas económicos. La transformación consciente de la sociedad necesita de una ciencia social, y Marx fundó las bases para ella con aportes propios y de otros (antepasados y contemporáneos).

-Igualmente, esto siempre fue así y nunca va a cambiar.

Las dos afirmaciones son equivocadas. El sistema de clases sólo existe desde hace como diez mil años. En todo el paleolítico y gran parte del neolítico (esos periodos comprenden cientos de miles de años) el Homo Sapiens vivió en tribus donde no existía la explotación. Ni la explotación económica ni la del varón sobre la mujer. Los sistemas de clase con sus relaciones sociales características (Estado, familia, esclavismo, mercancía) fueron una creación bastante reciente en tiempos antropológicos.

Si hay una constante en la historia humana es el cambio. Aún en periodos donde, en apariencia, nada cambiaba en cientos de años, esto era porque se estaban sucediendo cambios cuantitativos muy graduales que en determinado momento pasaban a una transformación cualitativa. Pasa que en esta época que vivimos, y especialmente desde la última mitad del siglo XX, debido a la falta deliberada de consciencia histórica con la que se nos educa y al constante bombardeo de los medios masivos de difusión, hay una tendencia en nuestra cultura a pensar en el futuro como una prolongación lineal del presente. Hablar de que la humanidad o la sociedad siempre fue así y nunca va a cambiar es tan poco serio como decir eso de uno mismo. Quien piensa que la vida no es cambio es porque tiene una visión “fotográfica” de la vida.

-¿Entonces por qué no estamos en el comunismo? Todas las revoluciones fracasaron o terminaron en dictaduras totalitarias.

Si esto no siempre fue así y puede cambiarse, no es menos cierto decir que el cambio propuesto hacia una sociedad sin explotación es quizás la empresa más difícil de toda la historia humana. Porque hasta ahora nuestras sociedades se formaron de manera “espontánea”, sin planificación, mediante el desarrollo ciego de nuestras fuerzas productivas, que han sido el motor de los cambios en nuestras estructuras sociales (la agricultura modificó la manera en la que la gente se relacionaba con el ambiente y consigo mismo, lo mismo hizo la industria).
Si el sistema de clases existe desde hace 10.000 años es muy poco serio pensar que va a ser superado en unos pocos años o incluso en un solo siglo, sin errores. Esta lucha por suprimir el sistema de clases existe desde hace dos siglos, por lo menos. Desde la misma revolución francesa que el movimiento comunista, generalmente con base en el movimiento obrero[4], viene luchando contra el capitalismo por una nueva sociedad sin explotación. Obviamente estas luchas fracasaron. Para desgracia de la humanidad, el capitalismo las ha sobrevivido. Ha habido muchos errores en estas luchas, característicos de la forma de pensar que no rompen con el sistema, por más que así lo reclamen[5]. Si se ve todo esto desde el prisma inmediatista y resultadista que suele predominar en el análisis de los procesos sociales, entonces “el comunismo fracasó” y no puede haber otra cosa que capitalismo. Pero si se ve todo esto desde un prisma verdaderamente histórico-mundial, se concluye que los últimos dos siglos que pasaron han sido de preparación, y que las batallas más decisivas por la auto-superación de la humanidad vendrán a partir de este siglo[6].

La transición hacia una sociedad sin explotación no es un problema que pueda ser resuelto por un partido o por un solo sector de la sociedad, sino por la gran mayoría de la humanidad[7]. Una profunda transformación social como la planteada no puede suceder sin una profunda autotransformación de los individuos. Autotransformación que debe ser encarada como una tarea práctica a afrontar ahora, y no en un futuro lejano.

Por eso quien califica a la asociación de los productores libres e iguales como utópica e imposible, en realidad lo que está diciendo es que no cree que él mismo sea capaz de vivir asociado en libertad e igualdad. Quien es escéptico de la auto-superación de la humanidad es porque es escéptico de su propia auto-superación. Quien habla negativamente de “la gente” piensa mal de sí mismo…

-Me parece que respondés de una manera muy terminante y soberbia.

Es posible. Es que cuando escucho a la gente repetir con tanta seguridad lo que dicen desde las usinas ideológicas del poder me da algo de bronca por su pereza intelectual y quiero que la vean.

Veo mucho egoísmo en las discusiones comunes sobre política y sociedad. Mucho de “lo que no me gusta es malo, lo que me gusta es bueno”. Se piensa exclusivamente desde el propio lugar o desde el propio grupo o sector. No se cultiva una visión de la totalidad porque no hay motivación para pensar más allá del ombligo y de los beneficios o perjuicios inmediatos. Tampoco se cultiva la actitud de ponerse en los zapatos del otro.

Eso lo veo concretamente cuando la gente se aferra como de un clavo ardiendo a una anécdota o hecho que fundamente su visión de la realidad, negándose a reconocer otros hechos u otras perspectivas para ver los hechos. Si una persona muerde a un perro seguro que sale en todos los diarios, pero no por eso vamos a dejar de pensar que generalmente ocurre al revés. Bueno, en este caso lo que veo es que la gente repite todo el tiempo la noticia de la persona que mordió al perro para sentenciar que hay la misma posibilidad de que pase una cosa u otra, o de que los perros casi nunca muerden a las personas.

Hay gente que forma su opinión a partir anécdotas o de los hechos que más se ajustan a sus preferencias ideológicas, y ahí es cuando se escuchan cosas como “el que es pobre es porque es vago”.

Si tuviéramos la misma actitud para nuestra vida práctica que para hablar de la sociedad y la naturaleza humanas (temas que frecuentemente quedan relegados a charlas de café, publicaciones de auto-ayuda o asados), no sobreviviríamos ni un día. Para cosas como hacer la comida, cruzar la calle o pagar una boleta nos manejamos adaptando nuestro pensamiento y movimiento a la complejidad de la tarea a realizar. Pero lo que reina en la cultura actual (y no es casual, es deliberado) es una gran falta de formación y de motivación para reflexionar sobre la vida humana con la seriedad y la complejidad que se merecen (y seriedad y complejidad no son sinónimos de volverse un doctor).

Es para torcer la rama para el otro lado que articulo mis respuestas de manera lo más sólida posible, atacando de manera vehemente (con cuidado de no herir susceptibilidades, lo que a veces no es posible ni deseable) a las formas de pensar que son erróneas y, además, dañinas, porque la falta de consciencia resulta en infelicidad y sufrimiento evitables. Varias veces he constatado que el enfoque “humilde” no funciona porque les permite a los interlocutores seguir en su zona cómoda. Entonces, si voy a ser acusado de soberbio, prefiero serlo defendiendo la posibilidad de que la humanidad se supere a sí misma que defendiendo la posibilidad contraria.

[1] O, por lo menos, un egoísmo más inteligente que el actual, que es un egoísmo imbécil que sólo nos sirve para una felicidad efímera basada en lo material, pero amenaza nuestra supervivencia como especie.

[2] Ver Historia de la Revolución Francesa, de Kropotkin.

[3] “Práctico” es otra palabra bastardeada. En esta cultura de la velocidad y del pragmatismo, “práctico” aparece como sinónimo de concreto, inmediato, sencillo, tangible.

[4]Todos somos criados y educados en esta sociedad capitalista donde las ideas y valores éticos dominantes son los del capitalismo. Por lo tanto el obrero, generalmente, piensa como burgués y no pocas veces puede esgrimir los mismos pensamientos anticomunistas que los voceros de quienes le explotan (esos mismos que los acusan de subversivos o de comunistas cuando hacen huelga por aumento de salario).

[5] El golpe de Estado del partido bolchevique -que se reclamaba marxista y comunista- terminó por erigir una forma de capitalismo brutal caracterizada por el totalitarismo del Estado-Partido. Estos regímenes han asociado la palabra comunismo a su naturaleza anticomunista, y han asociado al marxismo a su ideología de Estado, haciendo de esta manera un gran favor a la propaganda pro-capitalista.

[6] Hay innumerables datos que señalan la decadencia de la civilización capitalista que estamos viviendo. Será en las próximas décadas, por lo tanto, donde se plantee claramente la disyuntiva de superar esta forma de vida alienante o extinguirse.

[7] Generalmente la humanidad explotada, porque la humanidad que se beneficia de este sistema de explotación está muchísimo más condicionada psicológicamente como para tomar consciencia de que esta forma de vida nos lleva a la extinción y de que debe ser transformada desde la raíz.

Final y… ¿principio?

Un diálogo como el presentado puede tener dos finales. El primero, lamentablemente muy predecible, es:

-Bueno, si vos querés desperdiciar tu vida en esas pavadas hacélo, yo sigo con la mía.

El segundo, que requiere cierta dosis de modestia que no abunda cuando se habla de estos temas, es:

-No estoy convencido, pero voy a buscar más información.

En el primer caso, a la mierda, aunque no creo que hayas llegado hasta acá. En el segundo, quiero prevenir que en todo lo que dije arriba hay muchísimo conocimiento sintetizado. Podría citar mucha bibliografía pertinente para todo lo que dije, pero sería un trabajo extra y, además, no me parece lo más importante.

Lo más importante me parece crear consciencia sobre un asunto: la vida social humana sólo puede abordarse seriamente desde una perspectiva de lo complejo, y esto requiere no sólo estudiar y leer sobre datos e historia, sino educar la propia mente para abordar los problemas complejos de una manera compleja. Requiere de una formación teórica. En las cuestiones sociales, el debate capitalismo vs comunismo pone a prueba el temple intelectual y ético de las personas, porque es un tema que genera muchos partidismos y donde es difícil autodisciplinarse para construir una posición objetiva.

Pero también hay una “trampa” en todo esto. La realidad es que quienes más interesados están en formarse teóricamente para estudiar las cuestiones problemáticas de la vida social humana son quienes tienen una motivación para contribuir a resolverlas. Es muy raro que alguien se tome este trabajo de investigación, reflexión y discusión si no piensa hacer nada al respecto.

Salvo para los adeptos a la contemplación, la motivación para buscar la verdad es generalmente la acción. La motivación de buscar argumentos para autoafirmarse y monopolizar discusiones de “política” no es suficiente para esta labor que propongo. Tiene que haber un sincero interés por participar en la auto-superación de la humanidad. Y cuando digo interés no me refiero a esas sensaciones efímeras tipo “me gustaría saber algo más de tal tema”; me refiero a una necesidad existencial expresada en una manera concreta, hacia una dirección particular.

Si compartís esa necesidad conmigo, te recomiendo 3 textos para seguir, todos ellos los encontrás fácilmente en Google.

El Manifiesto Comunista, de Karl Marx y Friedrich Engels.
La conquista del pan, de Piotr Kropotkin
El placer de la revolución, de Ken Knabb


Si no compartís esa necesidad ni creés que nunca lo vayas a hacer, espero que este texto te haya resultado una lectura “interesante”
Fuente: http://el-radical-libre.blogspot.com/2010/01/capitalismo-y-comunismo.html

29.12.09

China. la Gran Paradoja Histórica

China.- la Gran Paradoja Histórica.

Los dirigentes del Partido Comunista Chino se identifican con los dirigentes políticos imperialistas norteamericanos en la contaminación del planeta.

Autor: Ulises Casas Jerez [casasulises@hotmail.com].
Crítica Política Numero: 185.
Fecha: 21 de Diciembre de 2009.

Como lo hemos dicho, no son los individuos los que hacen la Historia, sino la evolución de las condiciones materiales económicas de sus pueblos. Hasta ahora, quienes han constituidos partidos políticos a los cuales les han colocado la palabra “comunista”, en realidad no han podido comprender lo que significa el comunismo como conceptualización filosófica, ideológica, política e histórica. Lo que esos dirigentes han llevado a cabo es un enfrentamiento generalmente violento para derrocar a otras dirigencias en el poder político, asumir su posición y usufructuar las condiciones económicas, sociales y políticas de la sociedad en la cual han logrado tomárselo. Si analizamos en profundidad a cada uno de esos dirigentes, y al grupo partidista en conjunto, podemos concluir en que siempre tuvieron como objetivo fundamental la toma del poder político en manos de unas castas económicamente poderosas; instalados violentamente en el poder iniciaron una poda de esa casta y se instauraron como grupo político y familiar iniciando una era en la cual, aunque la estructura económica estaba en poder del Estado, éste es un ente abstracto cuya concritud se ubica en cabeza de sus dirigentes. Es así como el grupo comunista se constituye en una burocracia voraz que depreda la riqueza de la sociedad. Posee el mismo carácter de la casta dominante capitalista aunque de origen diferente y en condiciones diferentes.
En el caso de la llamada “Republica Popular China”, en donde la dirigencia del Partido Comunista se tomó el poder en 1950, se llevaron a cabo diversas situaciones que llevaron a que su economía tuviese un tratamiento diferente a la que los dirigentes comunistas de otras naciones habían dado a la misma. En la actualidad, China se ha convertido en una de las potencias económicas de mayor desarrollo del mundo. Su producción industrial compite con Estados Unidos y la Unión Europea y el gran capital internacional se encuentra allí como en cualquier otra parte del mundo. Las tesis del comunismo o del socialismo no tienen función alguna en esa gran nación. Por el contrario, su desarrollo económico solo tiene en cuenta el crecimiento competitivo con las grandes potencias y en esa dirección es posible que las supere gracias a la centralización estatal de su economía.
En las anteriores circunstancias, en la reunión que se llevó a cabo en días pasados en la ciudad de Copenhague, en Dinamarca, tanto Estados Unidos como China, ambas como potencias industriales del mundo, coincidieron en sostener la producción sobre las condiciones actuales de contaminación del medio ambiente y negarse a tomar medidas de fondo para detener esa contaminación.
Cuando nosotros, desde el punto de vista del materialismo dialéctico, afirmamos que las condiciones materiales económicas de la sociedad van determinando la conducta de los individuos que la componen, estamos respondiendo a la realidad, a la objetividad de la evolución humana. Aquí sigue imperando el principio de ser el “ser social el que determina la conciencia”. La dirigencia política de los países del mundo obedece al desarrollo económico de sus respectivos pueblos y ese desarrollo no puede detenerse con medidas que detengan la contaminación que su industria produce al planeta. Hasta ahora, la industria necesita del carbón para su desarrollo, y China es el país que mayor uso hace del mismo, convirtiéndose en el mayor contaminador del medio ambiente del planeta.
El que la casta dirigente comunista se agrupe alrededor de un partido político que se denomina aún “comunista”, no significa que sea comunista. En ese sentido el Partido Demócrata y el Partido Republicano de los Estados Unidos poseen la misma posición ante el desarrollo de la economía de su país; podríamos decir que podrían también unirse y denominarse “comunista” sin que ello afecte de alguna manera el desarrollo de su economía. La diferencia se encuentra en que en China, la casta “comunista” tiene centralizada la economía en el Estado y en Estados Unidos esa economía la centralizan las grandes empresas multinacionales y el poder mundial del poder financiero. Pero el Estado, en China, es el grupo denominado “Partido Comunista de la República Popular China”, nombre emblemático que domina ideológicamente sobre sus más de mil trescientos millones de habitantes de esa inmensa nación.
Llegará un momento en el cual la forma corresponda al contenido y entonces, ese nombre de “comunista” dará lugar a otro. Lo real, en el mundo actual, es que en parte alguna del planeta existe un modo de producción diferente al modo de producción capitalista; en consecuencia el poder político, en todos los países del mundo, corresponde a ese modo de producción histórico. No es que una denominación oportunista vaya a cambiar la estructura por ese mismo hecho de darse un nombre cualquiera. El nombre sirve para encubrir el contenido y se hace con la finalidad de usufructuar el poder económico bajo la sombrilla del poder político. Quienes a mediados del siglo pasado creímos en el comunismo de esos países, los que se derrumban al final del mismo, seguimos siendo honrados y honestos y por ello nos salvamos de esa contaminación ideológica.

9.12.09

Comunismo ideal o comunismo material

perdonen el atraso en publicar tarde, es que ayer no pude hacerlo.
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Comunismo ideal o comunismo material

Malime
Kaos en la Red

Anarquía político-productiva o centralismo democrático. Los movimientos de base, desde su complejidad, son formas incipientes de poder alternativo al del estado burgués.


El diario Publico el pasado 10 de octubre de 2009 publicó una interesante entrevista realizada a Roland Denis escritor y militante político venezolano, que fue entre 2002 y 2003 viceministro de Planificación y Desarrollo del gobierno Chávez. Reproducido también en la página Sin Permiso y Rebelión.

En ella se hace un análisis de la compleja situación que tiene lugar en Venezuela, con un líder como Hugo Chávez hasta ahora indiscutible entre la mayoría del pueblo venezolano, pero que a pesar del surgimiento de los consejos comunales, las parroquias, los consejos obreros, no se termina de comprender la naturaleza clasista del Estado proletario, de cómo la burguesía está organiza como clase dominante, y como lo hacen los trabajadores, cómo desde esa realidad popular surgida por abajo en actual Estado burgués venezolano se debe organizar una estructura de poder hacia arriba, que en su desarrollo mande al basurero de la historia a la caduca maquinaria estatal burguesa capitalista.

Denis como otros revolucionarios críticos con el proceso venezolano, destaca cómo debido a la existencia de la actual maquinaria estatal burguesa es posible que gentes (una derecha endógena dentro del gobierno) que se autotitulan chavistas, que se ponen la gorra chavista en aras de conseguir sus prebendas personales, poniendo pegas y dificultando el movimiento popular surgido desde abajo, lo que se traduce en que muchos revolucionarios terminen abandonando los movimientos de base o cayendo en un izquierdismo antichavista.

Estas frases que se reproducen en negrita a continuación sintetizan el problema de fondo que hay en el chavismo y en la izquierda al no comprender la función histórica del Estado y la Democracia. Cómo la clase social minoritaria que es la burguesía necesita de delegados políticos organizados a través de los partidos políticos para que administren sus intereses, y como deben organizarse los trabajadores con una democracia directa y permanente de abajo arriba, liberándose del trabajo enajenado capitalista y ejerciendo el poder de forma permanente como nos destacan Marx y Lenin con la experiencia de la Comuna de París, controlando y revocando en todo momento a los mandatarios.

“Lo que ocurre en Venezuela no se puede entender si, más allá de la figura de Hugo Chávez, no se ve ni se valora el papel jugado por un movimiento de base sumamente rico y complejo, siempre en una relación problemática con el Estado.

"…la revolución bolivariana es una programática profundamente libertaria, de ahí que aquí se hable abiertamente de la necesidad del desarrollo de otro poder completamente distinto, que tenga como base la capacidad de autogestión y autogobierno del pueblo como tal.”

Los movimientos de base, desde su complejidad, son formas incipientes de poder alternativo al del estado burgués. No es que tengan una relación problemática con el Estado, sino que se oponen a esa forma de Estado que les explota y que les impide la verdadera democracia participativa de forma directa y permanente con la que poder resolver los múltiples problemas a los que el pueblo diariamente se enfrenta.

El fallo de la revolución “soviética” y los fallos existentes que el propio Fidel denuncia sobre el peligro interior de la revolución en Cuba, siguen sin comprenderse. Aunque en la letra de la Internacional Comunista se diga que “ni en dioses ni tribunos está el supremo salvador, nosotros mismos realicemos el esfuerzo redentor” de alguna forma se induce a la esperanza del dios salvador en vez del pueblo como protagonista organizado de su propia liberación, y como los grandes autores, sobre todo Lenin en su obra “El Estado y la Revolución y La Revolución proletaria y el renegado Kautsky” destacan de que no es cuestión de intentar perfeccionar la maquinaria estatal burguesa, pretender hacerla “más democrática”, sino destruirla y sustituirla por la de los trabajadores organizados como clase dominante.

No se trata de perfeccionar una maquinaria clasista y obsoleta con líderes salvadores que pretendan hacer convivir el capitalismo y el socialismo, pretendiendo que el socialismo “democráticamente triunfe”.

Desde una maquinaría, que sigue dividiendo al pueblo mediante el trabajo enajenado en sociedad civil-productiva y en clase política, por muchos intentos de perfeccionarla nunca logrará liberarse, lo único que se conseguirá es retornar al capitalismo duro y puro como sucedió con el llamado “Socialismo Real”, donde nunca se destruyó la estructura de poder burguesa con su falsa división de poderes: parlamentario, administrativo y judicial.

Lo único que se sustituyó fue a los partidos burgueses, administradores del orden capitalista por los aparatichis de los partidos comunistas, generando entre los propios aparatichis la nueva burguesía para que, como dijo Lenin sobre el carácter burocrático del aparato burgués capitalista aquel socialismo burocrático retornara a la esencia del burocratismo que es el capitalismo, ya sin pegas burocráticas socialistas para conseguir el pleno desarrollo capitalista.
En el socialismo el nuevo ser liberado del trabajo enajenado puede y debe realizarse en toda su plenitud y dimensión creativa político-productiva, administrando los centros producción y ejerciendo todo el poder político en cada nivel de organización, empresarial, local, regional, nacional e incluso internacional cuando la revolución mundial triunfe.

La Comuna de París fue el intento de la forma espontanea del pueblo organizado como clase dominante. Marx, en La Guerra Civil en Francia lo explica: "La Comuna estaba formada por los consejeros municipales elegidos por sufragio universal en los diversos distritos de la ciudad. Eran responsables y revocables en todo momento. La mayoría de sus miembros eran naturalmente, obreros o representantes reconocidos de la clase obrera..."

"La comuna no había de ser una corporación parlamentaria, sino una corporación de trabajo, ejecutiva y legislativa al mismo tiempo... En vez de decidir una vez cada tres o seis años que miembros de la clase dominante han de representar y aplastar al pueblo en el parlamento, el sufragio universal había de servir al pueblo, organizado en comunas, para encontrar obreros, inspectores y contables con destino a su empresa, de igual modo que el sufragio individual sirve a cualquier patrono para el mismo fin."

Aquel sufragio universal, no era el sufragio burgués, pero si al no existir la asamblea permanente, de alguna forma tenía una semejanza al no unirse el poder político-productivo (desde los lugares naturales donde los trabajadores siempre están presentes), como se planteó treintaicuatro años después en la Rusia de 1905 a través de los soviets obreros surgidos desde las fábricas. Aunque tampoco aquel soviet llegó a desarrollarse tras la revolución de 1917 dados los condicionantes materiales, técnico-culturales que permitieran a los trabajadores dirigir directamente el proceso productivo y político. A lo sumo se consiguió, cada equis años, elegir los diputados obreros a un parlamento ajeno al control obrero desde el soviet de fábrica.

Pero como destaca Marx, desde aquellas limitaciones, se pretendía que en la Comuna se legislase y se ejecutase sin recurrir a la falsa división de poderes del Estado capitalista, donde el poder judicial puede condenar y el gobierno condonar según la condición social del condenado. Los consejeros municipales eran elegidos con un mandato al que tenían que rendir cuentas en todo momento. No como sucede en las elecciones parlamentarias, regionales o de los ayuntamientos capitalistas, donde son elegidos, no por un mandato sino por equis años para que hagan lo que les de la gana, y que como podemos comprobar, a pesar de sus implicaciones en el caso Gurtel, los peperos abandonan el grupo popular pero no renuncian al escaño y el pueblo que les eligió nada puede hacer para revocarlos.

Lenin en su obra “El Estado y la Revolución decía: "La república democrática es la mejor envoltura política de que puede revestirse el capitalismo." Citando a Engels, "llama al sufragio instrumento de dominación de la burguesía."

"Los demócratas pequeñoburgueses... todos los socialchovistas y oportunistas de Europa Occidental, esperan en efecto, más del sufragio universal... inculcan al pueblo la falsa idea de que el sufragio universal es, en el Estado actual, un medio capaz de revelar realmente la voluntad de la mayoría de los trabajadores."(...)"estos seudosocialistas que han sustituido la lucha de clases por sueños sobre la conciliación de clases, también se han imaginado la transformación socialista... no como el derrocamiento de la dominación de la clase explotadora, sino como la sumisión pacífica de la minoría a la mayoría."

Hoy son muy diferentes a las condiciones que había en 1871 y 1917, los trabajadores no necesitan de empresarios para ejercer el poder productivo y político. Además hoy, dada la crisis sistémica del capitalismo ni se salvan los trabajadores del llamado “cuello blanco”, los ingenieros y demás técnicos cualificados no se libran de ir a la puta calle. Los trabajadores de cada centro de producción o actividad social, si disponen de cierta formación y capacidad de organización, pueden elegir a los compañeros de mayor confianza encargados de la dirección empresarial y a los delegados políticos a los niveles superiores de gestión político-administrativa, en cada escalón de la compleja escalera gubernativa, local, regional o nacional, de forma que se resuelvan los problemas locales y los que son generales asciendan a la cúspide gubernativa y desde allí poder planificar las necesidades generales reales que previamente han sido subidos desde la base.

Es cierto que falta comprender cómo desde cada lugar, desde las condiciones de cada país, se pueden establecer esas formas de democracia directa, cómo estructurar la lucha por el poder desde los diversos centros de producción, desde ramas de producción o actividad social, cultural, educativa, etc., para que finalmente en su desarrollo se conviertan en formas de poder. Pero si tenemos en cuenta la experiencia del movimiento reivindicativo obrero, vecinal, estudiantil e intelectual durante la época franquista, si aquel movimiento espontáneo de los sectores populares le dotamos de contenido político estatal, llegaremos a la comprensión de cómo debe ser nuestra Comuna o Soviet del siglo XXI.

Tampoco es cuestión, como el izquierdismo pretende, tomando las calles por las vanguardias revolucionarias, lo que tenemos que hacer es prepararnos para educarnos cómo tomar los centros de producción y de actividad social, cultural, educativa, etc. La burguesía no podrá contar con tantos elementos represivos como hace contra las manifestaciones de calle con sus cuerpos especiales de represión. No dispondrán de suficientes elementos para reprimir a los trabajadores que toman esos bienes sociales existentes a lo largo y ancho del país, generados históricamente por los llamados a ser los verdaderos dueños, los hoy explotados trabajadores.

Estas palabras de Lenin, dirigidas a los revolucionarios de entonces, siguen siendo de máxima actualidad: ”La fuerza de la clase obrera reside en la organización. Sin organización de las masas, el proletariado no es nada. Organizado, lo es todo”.

“Vosotros debéis leer más, tenéis que formaros y formar a los otros... es necesario trabajar con todas las fuerzas. Tenéis que desarrollaros políticamente, y entonces el trabajo en los círculos será para vosotros un placer.”


“Un revolucionario blandengue, vacilante en las cuestiones teóricas, limitado en su horizonte, que justifica su inercia con la espontaneidad del movimiento de masas, más semejante a un secretario de tradeunión que a un tribuno popular, incapaz de presentar un plan audaz y de gran alcance que imponga respeto incluso a sus adversarios, inexperto e inhábil en su arte profesional no es, con perdón sea dicho, un revolucionario, sino un mísero artesano”.

“Hay que ir a los obreros, para aportar a los obreros conocimientos políticos... Debemos ir a todas las clases de la población como teóricos, como propagandistas, como agitadores y como organizadores”.


Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=93757

17.11.09

Catecismo Marxista, y encuesta: ¿Qué tan marxista eres?

Para reirse un poco. (La política no necesariamente tiene que ser fome)
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CATECISMO MARXISTA
POR SAGANDHIMEO mau_dimeo@hotmail.com

ADVERTENCIA

Este escrito es meramente lúdico, cualquier parecido con alguna obra religiosa es pura coincidencia.

CREDO MARXISTA


Creo en un solo Marx, padre del marxismo, creador del socialismo científico y del materialismo dialéctico. Creo en un solo Engels, colaborador único de Marx, nacido de la burguesía antes que todos los marxistas. Materia en movimiento, movimiento de materia, producto histórico no ideal, de la misma naturaleza del mundo, de donde todo se transforma. Marx, que a nombre del proletariado asumió un papel revolucionario y por obra de sus intereses políticos fundó la primera internacional y se hizo dirigente de ésta. Y por causa de conflictos políticos fue expulsado de su país y por nuestra causa murió en la miseria en tiempos de desarrollo industrial. Sus ideas impulsaron la revolución rusa a la tercera década de su muerte. Y de nuevo resurgirán sus principios para juzgar a la burguesía e instalar el reino de la libertad. Creo en Lenin, revolucionario de toda una nación, que procede de Marx y Engels, que con las ideas de Marx y Engels instituyó el socialismo real y que habló en nombre de ellos. Creo en el socialismo científico, que es uno, praxiológico y revolucionario. Confieso que hay un solo socialismo cubano, fundador del marxismo en América latina. Espero la revolución proletaria a nivel mundial y la vida del mundo comunista Amén.


MANDAMIENTOS MARXISTAS

1. Amarás al proletariado sobre todas las cosas.
2. No tomarás el nombre del comunismo en vano.
3. Combatirás las injusticias, donde quiera que se presenten
4. Reconocerás el valor de cada trabajador
5. Combatirás la opresión y la violencia callada
6. Practicarás y promoverás la sexualidad libre y responsable
7. Combatirás la explotación y la propiedad privada
8. No caerás en falsa consciencia
9. No consentirás pensamientos ni deseos enajenantes
10. No codiciarás fetiches (dinero, poder, fama, etc.).


BEATITUDES MARXISTAS

En aquel tiempo, viendo la muchedumbre, entró a las fábricas, se sentó, y los obreros se le acercaron. Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:
«Bienaventurados los pobres, porque en la lucha no tienen nada que perder.
Bienaventurados los revolucionarios, porque ellos expropiarán la tierra para sí.
Bienaventurados los que protestan, porque ellos lograrán emanciparse.
Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados (sic).
Bienaventurados los que adquieren memoria histórica, porque ellos serán recordados.
Bienaventurados los que universalizan sus intereses, porque ellos vivirán el comunismo.
Bienaventurados los que trabajan por el socialismo, porque ellos serán llamados revolucionarios.
Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia (sic), porque de ellos es el Reino de la libertad.
Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros (sic) por causa del marxismo.
Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el comunismo; pues de la misma manera persiguieron a los revolucionarios anteriores a vosotros».
¿QUÉ TAN MARXISTA ERES? (JUECES MARXISTAS)

Suma tus puntos a-0 b-1 c-2

1. ¿Consideras que la realidad es fundamentalmente material y se mueve hacia formas más complejas?

a) exactamente
b) la realidad es material o la realidad está en movimiento, pero no ambas.
c) la realidad es fundamentalmente espiritual y el movimiento es aparente

2. ¿El modo en que las personas se ganan la vida determina su concepción del mundo?

a) exactamente
b) es un factor importante pero no fundamental
c) no, es al contrario, nuestro pensamiento o nuestra religión o las relaciones de poder o algún otro factor es lo que determina nuestra concepción del mundo.

3. ¿Es posible instaurar el comunismo?

a) Es probable, dependiendo de las condiciones materiales y el desarrollo de la conciencia histórica
b) Es poco probable, pues difícilmente se logrará una sociedad libre de egoísmo
c) No es deseable, pues es preferible mejorar el capitalismo o regresar a economías anteriores.

Resultados.

0 puntos: marxista ortodoxo (no confundir con la ortodoxia soviética)

1-2 puntos: marxista heterodoxo (probablemente partidario de la teoría crítica)

3 puntos: ni marxista ni antimarxista

4-5 puntos: antimarxista

6 puntos: antimarxista radical.


Fuente: http://sagandhimeo.spaces.live.com/blog/cns!914F4F3A85D91181!537.entry

11.11.09

"No son pocos, aunque seguramente no mayoría, quienes hoy añoran aquellos tiempos de la antigua RDA"

9 de noviembre de 1989, 20 años después: entrevista al filósofo Miguel Candel sobre el muro de Berlín
"No son pocos, aunque seguramente no mayoría, quienes hoy añoran aquellos tiempos de la antigua RDA"

Salvador López Arnal
Rebelión


Filósofo de una pieza, profesor expulsado de la Universidad el año de la muerte del dictador golpista, catedrático de griego, traductor de Aristóteles, Marx, Gramsci y Searle, ensayista lúcido, autor de dos magníficos libros injustamente olvidados (El nacimiento de la eternidad, Idea Bokks, Barcelona, 2002, y Metafísica de cercanías, Montesinos, Barcelona), actual profesor en la Facultad de Filosofía de la UB, Miguel Candel es, en opinión de alguien que se considera amigo y discípulo suyo, uno de los más grandes luchadores y pensadores que ha generado el movimiento comunista catalán en estos últimos cuarenta años.

*

Finalizada segunda guerra mundial, derrotada la Alemania nazi por las fuerzas aliadas, con la destacada participación del Ejército Rojo y la resistencia comunista, ¿cómo se organizó la estructura política de Alemania bajo la ocupación?

No soy historiador y no conozco los detalles, pero sabemos que el país fue dividido en cuatro zonas de ocupación, controladas respectivamente por la URSS, los Estados Unidos, el Reino Unido y Francia. La capital, Berlín, fue sometida a una división semejante. No existía gobierno alemán, sino únicamente una administración militar cuatripartita formada por los aliados vencedores. Recuerdo una película de la época, titulada en castellano Cuatro en un jeep, en referencia a unas patrullas mixtas formadas por cuatro soldados, uno de cada país ocupante, que circulaban por Berlín; la película, si no recuerdo mal, apuntaba ya a la guerra fría, contraponiendo la “libertad” de que supuestamente gozaban los soldados occidentales con el régimen dictatorial al que estaba sometido su camarada soviético.

En referencia a la resistencia interna comunista, aunque parece que la represión nazi consiguió reducirla a la mínima expresión, existió, pero su papel ha sido minimizado o ignorado por la historiografía occidental.

Poco tiempo después, Alemania quedaba dividida en dos Estados, la RFA y la RDA. ¿Por qué? ¿Cómo surgió la división?

Fue fruto de la guerra fría. Occidente decidió establecer una punta de lanza frente al bloque socialista y apadrinó la constitución de la República Federal de Alemania (RFA) en las zonas de ocupación occidentales. En respuesta, y sólo en respuesta a eso, que era una violación de los acuerdos de Yalta y Potsdam, la URSS apadrinó la creación de la República Democrática Alemana (RDA) en su propia zona de ocupación. La inclusión de Berlín occidental en la RFA motivó el bloqueo terrestre de la capital alemana por los soviéticos, a lo que los aliados occidentales respondieron con el célebre “puente aéreo” que abasteció a Berlín occidental por aire durante unas semanas de gran tensión en que el conflicto armado abierto se mascaba en el ambiente. Se sabe que Occidente esperaba (de hecho, deseaba) que los soviéticos derribaran algún avión del puente aéreo para servirse de ello como pretexto para desencadenar un ataque militar sobre la zona soviética que podría haber desembocado en un ataque nuclear contra la Unión Soviética misma.

Hay que decir, de pasada, que la idea de dividir Alemania en zonas de ocupación (y, por supuesto, la de dividirla luego en dos estados) no partió de los soviéticos, sino de Occidente. Stalin había propuesto, inútilmente, en Yalta que Alemania se mantuviera unida aunque, eso sí, totalmente desmilitarizada, como un estado tampón entre Europa occidental y Europa oriental.

El muro fue construido posteriormente. ¿Por qué se planificó su construcción? ¿Qué se quería conseguir con su levantamiento?

No fue una solución políticamente muy hábil, que digamos, pero respondía a la necesidad de poner freno, entre otras cosas, a la sangría constante de cuadros profesionales que sufría la RDA como efecto de la política de captación sistemática realizada por la RFA. La RDA formaba, por ejemplo, con cargo a su erario, médicos de gran preparación profesional que luego pasaban a engrosar los cuadros médicos de la RFA sin que ésta hubiera tenido que invertir un céntimo en su formación. El argumento oficial de la RDA de que era una medida defensiva para evitar una agresión occidental no es más que un pretexto, bastante ridículo en la era de la aviación y de las armas balísticas. Incluso en caso de ataque terrestre, el muro de poco hubiera servido contra una columna blindada y unos cuantos bulldozers…

Durante sus años de existencia, ¿fueron muchos los ciudadanos alemanes represaliados y perseguidos, incluso muertos, al intentar saltar el muro? ¿Por qué los ciudadanos alemanes no podían pasar libremente a la otra Alemania?

No conozco cifras, pero tengo entendido que las víctimas mortales en la RDA no fueron muy numerosas. Represaliados, en general, sí parece evidente que los hubo en gran número. El hecho de no poder salir del país ya era, en sí mismo, una forma de represión, que obedecía básicamente al fenómeno que menciono en respuesta a la pregunta anterior. En lugar de la prohibición indiscriminada se podría haber optado por una fórmula que sí se adoptó más tarde en algunos países del bloque socialista: condicionar el permiso de salida de las personas con estudios superiores o profesionales especializados al depósito de una fianza por el importe aproximado de la formación recibida.

Durante sus más de 40 años de existencia, ¿cómo valoras la organización política de la RDA? ¿Era ese estado oscuro, opresor, policial que se nos ha contado, que se nos cuenta con insistencia nada inocente e ideológicamente muy marcada?

Me da la impresión, por lo que he leído y lo que vi en mi visita a la RDA en 1983, que la verdad se encuentra a medio camino entre los cuentos de terror occidentales y los cuentos de hadas orientales. Lo cierto es que no son pocos, aunque seguramente no mayoría, quienes hoy añoran aquellos tiempos en el territorio de la antigua RDA. Creo que la película Goodbye, Lenin da una imagen bastante fiel de aquella realidad, con todas sus luces y sus sombras.

¿Cómo se produjo la caída del muro? ¿Había un fuerte apoyo popular para su destrucción?

Yo diría que sí. Pero no hay que olvidar que las protestas que iniciaron el proceso tenían un carácter más bien de crítica dentro del sistema (invocando la “perestroika” gorbachoviana, por ejemplo) y que luego, gracias, probablemente, a las “ayuditas” del otro lado, se convirtieron en una revuelta contra el sistema. Pero la destrucción del muro fue en realidad fruto de una decisión bastante alocada tomada por el gobierno de la RDA de aquel momento con la esperanza de apaciguar los ánimos y sin prever que Helmut Köhl, el canciller de la RFA, jugaría con tanta habilidad la carta de la reunificación. Ahora bien, lo que propició realmente el consenso en torno a la reunificación no fue la caída del muro en sí, sino la “compra” de las conciencias de los ciudadanos de la RDA con la famosa medida del cambio de marcos orientales por marcos occidentales a razón de uno por uno (con la consiguiente inflación, que está en la raíz de todas las dificultades económicas que viene arrastrando desde entonces la RFA unificada).

¿Por qué las autoridades alemanas de la RDA no resistieron más y no hicieron casi nada para evitar la digamos unificación, con clara dominación occidental, de los dos estados?

Porque eran mucho menos perversas y mucho más estúpidas de lo que se decía en Occidente. Aunque tampoco hay que olvidar la real perversión de aquellos que ya no creían en los ideales que decían defender y que vieron una ocasión de oro (nunca mejor dicho) para medrar vendiéndose al enemigo.

En tu opinión, ¿la caída del Muro de Berlín significa la derrota del comunismo? ¿Surge con su caída, como también se afirma y se ha afirmado con insistencia, el reino de la Libertad?

Significa, indudablemente, la derrota de una forma degenerada de socialismo autoritario que no es deseable que vuelva jamás. Pero también la muerte prematura de unas esperanzas de reforma democrática del socialismo que latían en aquellas sociedades y que la torpeza, tanto de la vieja guardia como de los aperturistas à la Gorbachov, frustraron para mucho tiempo.

¿Sabes qué opiniones tiene actualmente la ciudadanía alemana del Este sobre ese período de su Historia reciente?

No conozco encuestas al respecto, pero hay indicios de que la visión retrospectiva que albergan amplias capas no es tan negativa como se nos quiere hacer creer. El comportamiento electoral de los Länder orientales es uno de esos indicios.

¿Por qué crees que hubo tantas críticas al levantamiento del muro en Berlín y, en cambio, apenas las hay sobre el muro levantado por el Estado racista de Israel?

Respondo con otra pregunta: ¿quiénes controlan los medios de comunicación de alcance planetario y de qué color son los gobiernos de más de medio mundo?

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=94300

3.6.09

Comunicado en relación con la muerte de Mauricio Morales y la campaña represiva contra el movimiento social radical en Santiago de Chile

Comunicado en relación con la muerte de Mauricio Morales y la campaña
represiva contra el movimiento social radical en Santiago de Chile


Primero, queremos manifestar nuestra completa solidaridad con los compañeros y compañeras que están sufriendo una campaña de represión política, policial y mediática, y ofrecemos nuestros recursos y colaboración para darles apoyo en su resistencia.

En segundo lugar, animamos a estos compañeros y compañeras a proseguir, tan pronto les sea posible y entregando todas sus energías, con las enormes tareas críticas y constructivas que son necesarias para desarrollar el movimiento revolucionario internacional. La reivindicación abierta de la labor crítica y constructiva de los anticapitalistas, orientada a mejorar y transformar la vida de la mayoría de la sociedad, es la mejor defensa contra la presente campaña represiva. Para todo ello pueden contar también con nuestra colaboración solidaria y nuestra solidaridad de clase.

En tercer lugar, y como aporte crítico para lo dicho en el segundo punto, animamos a estos compañeros y compañeras, en estos difíciles momentos, a que, a más de no apagar la llama de la dura resistencia concreta contra la represión estatal, conviertan la pérdida de su compañero Mauricio en un motivo para reflexionar, militante y decisivamente, sobre los métodos de lucha contra el capitalismo.
Desde nuestros comunes deseos de libertad y comunidad sin explotación ni opresión, y desde nuestra defensa del proyecto revolucionario con todas las consecuencias, pensamos que la violencia aislada contra las instituciones capitalistas o sus agentes no sólo no transforma a las relaciones sociales que sustentan el capitalismo y el Estado (ni a la subjetividad que produce y reproduce esas relaciones sociales), sino que tiene funestas consecuencias sobre las minorías radicales y sobre las luchas sociales, sirviendo de justificación para acometer campañas de represión y criminalización generalizadas contra lo más avanzado del movimiento social -no sólo contra las individualidades y grupos que hayan realizado o apoyen ese tipo de acciones. En el contexto actual, la violencia aislada puede ocasionar que, en unos días o semanas, se desbarate todo el trabajo hecho durante meses o años, teniendo que empezar de cero en muchas áreas y, además, con el desgaste de tener más compañer@s pres@s o procesad@s, frecuentemente aquell@s más valios@s.

En cuarto y último lugar, pensamos que hemos de desarrollar nuestra actividad revolucionaria encarando la transformación de la vida cotidiana, es decir no sólo en la lucha colectiva y directa contra el Estado/Capital, sino en todas las demás áreas de la vida. Sólo así lograremos una transformación revolucionaria, aparte de todas las condiciones materiales, de la subjetividad general, lo que servirá para superar el aislamiento del movimiento social radical y para darle una sólida base subjetiva, social y material, donde predomine la creación de una vida nueva y auténtica por sobre la destrucción de lo existente.

¡Solidaridad con los compañeros y compañeras de Santiago de Chile!
¡Por la cooperación revolucionaria internacional!
¡Por el comunismo, por la anarquía!


31 de Mayo de 2009


Roi Ferreiro, Círculo Internacional de Comunistas Antibolcheviques (Estado español)
Ricardo Fuego, Círculo Internacional de Comunistas Antibolcheviques (Argentina)
Fernando Salazar, comunista (Ecuador)
Julio Cortés, comunista, revista Masa (Chile)
Rebel-Díaz, anarco-comunista (Chile)
Nildo Viana, marxista autogestionário, Movimento Autogestionário (Brasil)


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Los arriba firmantes participamos en el proyecto de cooperación intelectual internacional “Lista de la
Autonomía Proletaria” - Contacto: cica_web@yahoo.com

19.1.09

Como “lucha” EE.UU. contra el terrorismo internacional



El siguiente articulo se encuentra publicado en la Revista “Socialismo – teoría y práctica”, Nº 2 de febrero de 1985. paginas 57, 58 y 59. Este articulo a pesar de que pronto cumplirá 24 años de haber sido publicado no deja de ser actual, ya que se podrían agregar a la lista los ataques que en los últimos años fueron perpetrados contra Afganistán e Irak; el intento de golpe contra el gobierno de Chávez,; los intentos de desestabilización política del gobierno del presidente Morales, entre otros.
Te invito a que con tus comentarios completes la lista.
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Como “lucha” de EE.UU. contra el terrorismo internacional

El hegemonismo estadounidense con relación a otras naciones y Estados tiene una larga historia. He aquí tan sólo una breve enumeración de los hechos que evidencian que EE.UU. suele practicar una política global de terrorismo estatal.

Diciembre de 1823. Se proclamó la doctrina de Monroe, según la cual EE.UU. tenía “derecho” al expansionismo en América Latina.

Agosto de 1853. Una escuadra de Marina de Guerra norteamericana obliga al Japón que “establezca relaciones diplomáticas” con EE.UU.

1855. Apoyado por el Gobierno estadounidense, el aventurero norteamericano William Walker, a la cabeza de tropas mercenarias, invade a Nicaragua y se proclama Presidente del país.

Febrero de 1893. EE.UU. impone su protectorado a las islas de Hawai.

Diciembre de 1898. No obstante haberse proclamado Filipinas como país independiente, Washington, al vencer a España en la guerra, le “compra” estas islas por 20 millones de dólares.

1901. Las tropas norteamericanas toman parte en aplastar la sublevación de los “bóxers” en China.

1899-1902. EE.UU. invade a Cuba, no obstante haberse proclamado ésta como Estado independiente en 1898.

Noviembre de 1903. Estados Unidos establece su control sobre la zona del Canal de Panamá.

1909. Las tropas norteamericanas desembarcan en Nicaragua y prácticamente ocupan el país. La ocupación continúa, con pequeños intervalos, hasta 1933.

Mayo de 1919. Comienzo de la intervención armada de EE.UU. contra la Rusia Soviética.

1934. El general Augusto César Sandino, héroe nacional de Nicaragua y líder del movimiento insurreccional que expulsó a los ocupantes norteamericanos, es asesinado por los servicios de inteligencia estadounidense y las fuerzas de la reacción interna. Se establece la dictadura pro-norteamericana de Somoza derrocada en 1979 por la Revolución Popular Sandinista.

Enero de 1948. La enmienda 402, aprobada por el Congreso de EE.UU. le concede a la Administración norteamericana el derecho de “ejercer una influencia metódica y sistemática sobre la opinión pública de otras naciones”.

Agosto de 1948. En Washington se aprobó la Directiva 20/1 del Congreso de Seguridad Nacional, que definió: “Son dos, en esencia, nuestros objetivos fundamentales con relación a Rusia. Primero, es reducir hasta el mínimo el poderío y la influencia de Moscú; segundo efectuar cambios radicales en la teoría y en la práctica de la política exterior que se practica con el gobierno de Rusia… Se trata, ante todo, de debilitar políticamente a la Unión Soviética y mantenerla así”.

Junio de 1950. La 7ª Flota de EE.UU. ocupa la isla Formosa (Taiwan).

Junio de 1950. Las Fuerzas Armadas de Estados Unidos inician la intervención en la Península de Corea.

Junio de 1953. Servicios Secretos norteamericanos provocan desórdenes en Berlín.

Agosto de 1953. El gobierno de Mossanddegh de Irán, es derrocado con una participación activa de la CIA.

Junio de 1954. Como resultado de la intervención armada contra Guatemala es derrocado el legítimo gobierno de Arbenz.

Marzo de 1957. Entra en vigor la doctrina Eisenhower-Dulles, según la cual la Administración de EE.UU. estaba autorizada para utilizar por su propia iniciativa las fuerzas armadas en el medio oriente.

Mayo de 1958. La CIA participa en los preparativos de un golpe militar para derrocar el Gobierno de Indonesia.

Abril de 1961. Mercenarios pagados por Washington desembarcan en la Bahía de Cochinos, en Cuba.

Noviembre de 1963. EE.UU. inspira en Vietnam del Sur un “motín” contra el dictador títere Ngo Dinh Diem, quien se hizo incómodo para Washington.

Agosto de 1964. La aviación estadounidense empieza a bombardear el territorio de la Republica Democrática de Vietnam.

Abril de 1965. Las tropas norteamericanas invaden República Dominicana.
Septiembre de 1973. Siendo apoyadas directamente por la CIA, las fuerzas reaccionarias de Chile derrocan al Gobierno de la Unidad Popular y establecen la dictadura militar fascista.

Marzo de 1980. EE.UU. comenzó a formar las “fuerzas de despliegue rápido”.

Abril de de 1980. La administración norteamericana, so pretexto de “liberar a los rehenes”, realiza una provocación armada contra la Republica Islámica de Irán.
Junio de 1982. El Presidente Reagan anuncia en Londres la “cruzada” contra el comunismo.

Agosto de 1982. Los marines norteamericanos desembarcan en el Líbano.

Septiembre de 1983. El Presidente de Estados Unidos proclama el “derecho” de Washington a realizar actos subversivos, por medio de sus servicios especiales, en los Estados soberanos.

Octubre de 1984. La granada independiente se hizo victima de la agresión armada por parte de los Estados Unidos de Norteamérica.

Marzo de 1984. La CIA mina los puertos del soberano Estado de Nicaragua.

Junio de 1984. La CIA confeccionó y trató de materializar los planes enfilados a desacreditar las transformaciones democráticas en Grecia, a derrocar el Gobierno del Movimiento Socialista Panhelénico, encabezado por A. Panpadreu. Las fuerzas reaccionarias de Grecia, dirigidas e inspiradas por la CIA, recurrían a actos violentos y terroristas contra los representantes de los círculos democráticos. Se atentó, en particular, contra la vida de varios activistas del Movimiento Socialista Panhelénico y del Partido Comunista de Grecia en diversas regiones del país. Se emprendieron intentos de desestabilizar la situación política dentro del país.

Junio de 1984. En una “conferencia sobre el terrorismo internacional”, celebrada en EE.UU. representantes de la Casa Blanca calificaron de “terroristas” a las naciones y Estados que se pronunciaran contra la política dictatorial de Norteamérica.

Agosto de 1984. El mundo quedo perplejo ante la “broma” del Presidente Reagan en el sentido de que la Unión Soviética se declaraba fuera de la ley y que, en consecuencia, dentro de cinco minutos comenzarían el bombardeo de aquélla.

14.10.08

El FPMR ante la candidatura del soplón Fernando Moreno

Por los compañeros asesinados en la fuga del 10 octubre de 1992

El FPMR ante la candidatura del soplón Fernando Moreno

Estas elecciones municipales no solo son el nicho de las ambiciones partidistas y las pugnas por la hegemonía en el bloque dominante como hemos denunciado, sino también un circo putrefacto donde se suceden las peores representaciones y lo más bajo de la política actual, agregándose al grueso de las candidaturas más de un tránsfuga, corrupto o soplón. Una Muestra de ello es la postulación a “concejal” de un delator e informante del otrora Consejo Coordinador de Seguridad Pública, más conocido como la “Oficina”. Su nombre es Fernando Enrique Moreno Vega, militante del Partido Radical Social Demócrata (PRSD), funcionario de la Municipalidad de San Miguel en su departamento de deportes.

Moreno Vega es un ex preso político que al momento de ser detenido el año 1990 no formaba parte de las filas del FPMR como ha circulado por ahí (al margen que la policía en su momento lo vinculara con nuestra organización), responsable en el 92 de la filtración de información que permitió a los aparatos represivos dar muerte a nuestros hermanos Pedro Ortiz Montenegro, Mauricio Gómez Lira (“Pum Pum”) y José Miguel Martínez (“Palito”), los cuales el 10 de octubre de ese año intentaron junto a otros prisioneros alcanzar la libertad desde la Penitenciaria de Santiago.

Al cumplirse 16 años de estos hechos, afirmamos que los combatientes Rodriguistas y en general los revolucionarios, han asumido con dignidad y responsabilidad las consecuencias y posibles costos de esta lucha, y por principios no han aceptado ni toleran la colaboración con los enemigos del pueblo y sus aparatos represivos, triste rol que le tocó jugar a este sujeto así como otros que ya pagaron por tan vil acto, el cual reconoció su labor de informante al ser confrontado por los compañeros presos políticos posteriormente a la fuga, debiendo Gendarmería aislarlo para su protección por ordenes “superiores”...

No es la primera ni será la última vez que gobiernos como estos fomenten la traición y la colaboración como estrategia para desarticular a las organizaciones revolucionarias, es la misma podredumbre ética y moral que origina la corrupción y las sucias maniobras, los cuoteos y arreglines de esta clase política, prácticas que expresan además el carácter de este sistema y modelo económico decadente.

Seguramente la posibilidad de optar a cargos públicos o de “representación popular” es la recompensa que personajes como Moreno Vega recibe finalmente de parte de sus pares, como lo han expresado entre pasillo dirigentes de su propio partido. Aunque es cierto también que tarde o temprano estos elementos reciben el castigo que la historia y los pueblos dan a los traidores, en la calle, pisoteados y hasta negados por sus propios compinches.

Sin duda este caso como otros no hace sino expresar el despotismo y la infamia que esconden los escritorios de quienes gobiernan este país, en contraposición del ejemplo digno y limpio que nos dejaron los luchadores y luchadoras caídos, quienes hasta el último combatieron el entreguismo y la falsa democracia de los traidores en el poder…

Vota Protesta, Botémoslos a Todos…23 de octubre Protesta Popular!!!
Este sistema es un fracaso, hay que cambiarlo…

Dirección NacionalFrente Patriótico Manuel Rodríguez
Santiago de Chile, 7 octubre de 2008
http://www.fpmr-chile.org/

En: http://www.fpmr-chile.org/soplon.html